lunes, 13 de julio de 2009

LA VIDA SENTIMENTAL DE SIMON BOLIVAR






La despedida en la Guaira es muy emotiva. Pues el sueño comienza a realizarse el 19 de Enero de 1.794 va a cumplir 17 años.




En la casa de Ustariz no sólo aprende a pensar y a expresarse con profundidad, también conoce a una noble dama que le roba el corazón, se llamaba María Teresa Rodríguez del Toro y Alayza. Tiene un enamoramiento tan repentino como ardiente. Simón quería casarse con ella enseguida. El papá de ella se opone por razones de edad ¡los dos son demasiados jóvenes! Tuvo que esperar dos años. Se veían con frecuencia porque Bolívar había encontrado en ella la ternura y el cariño que le faltaron desde la muerte de su Mamá. María Teresa Rodríguez del Toro, además era muy bella, muy dulce y muy sentimental.




Por fin la boda se celebraba en Madrid el 24 de Mayo de 1.802. Ella tiene 20 años, el tiene 19, los novios pudo exhibir como testigo del acto y primer declarante a un empingorotado "Sr. Don Luis Quijada Quiñones y Moreno, Marqués del inicio Conde de Revolledo. Bolívar no tuvo a su lado ningún pariente inmediato, pues de sus dos tios Esteban y Pedro ninguno estuvo presente en su matrimonio. Llenos de amor y ilusiones la juvenil pareja regresa a Caracas. Los parientes reciben con fiestas. La luminosidad y colorido del trópico deslumbran a María Teresa. Visitan también la hacienda San Mateo. Allí precisamente contrae una enfermedad tropical. El 22 de Enero casi a los ocho meses de casada, muere entre asombro y consternación de la familia.



Nuevamente el corazón de Simón Bolívar sufre un golpe de amarga soledad. Más tarde daría a un amigo:



"Quise mucho a mí esposa y su muerte me hizo jurar que no volvería a casarme". Y lo cumplido. La necesidad de olvidar el luto abatimiento y la soledad afectiva le impusieron a planificar otro viaje a Europa. Nunca más buscó otro amor como este, que le exigió constancia y pureza. Bolívar tuvo otras mujeres a las cuales amó de paso, sin concederles la importancia aún con la fascinadora Manuelita Sáenz quien el 1 de diciembre de 1827 salió para Bogotá, ante la solicitud de Bolívar de reanimarlo, tendría 29 a 30 años cuando la conocío toda su belleza algo gruesa, ojos negros, mirada indecisa, tez sonrosada sobre fondo blanco, cabellos negros, artísticamente peinados y los más bellos dedos del mundo era alegre, conversaba poco; Fumaba con gracia. Poseía un secreto encanto para hacerse amar Manuela celebró el cumpleaños de Bolívar en la Quinta. En el transcurso de la fiesta, ella realizó un fusilamiento simbólico de Santander, En la primera semana de agosto de ese mismo año, y a pesar de la orden de Bolívar de que permaneciera alejada del público, Manuela Sáenz puso treinta y dos pesos de plata en manos de don Pedro Lasso de la Vega por la casa marcada con el número 6-18 de la calle 10, de Bolívar.



El 11 de agosto de 1847 se enteró de la muerte de su marido, James Thorne, asesinado el 19 de junio de ese año. En su testamento, Thorne devolvía a Manuela los ocho mil pesos de la dote de los intereses; sin embargo, ese dinero nunca Llegó a sus manos. Así, inválida, acompañada por Simón Rodríguez (el Maestro del Libertador), quien también terminó su vida en Paita (1854), y las cartas del General O'Leary, acabó la vida de Manuela Sáenz, víctima de una extraña epidemia que llegó al puerto en algún ballenero, el 23 de noviembre de 1856.



Su muerte debía darle conmovedora prueba de abnegación y amor fue injusto en ese sentido tuvo con ella la lealtad acaso más egoísta que géneros aunque parezca lo contrario de ponerte que se separaran, por que "nada en el mundo puede unirnos bajo los auspicios de la inocencia y del honor" y solía llamar la amable loca, aunque ella merecía mucho más.
En la vida de Bolívar se conoce otra mujer que la llamaba "Mi gloriosa" cuyo nombre verdadero era Joaquina Garioca y que, firmaba "Gloriosa Simona Joaquina Trinidad y Bolívar".
En París derrochó como en otras capitales Europeas y también en París creció sin amor por Fanny du Villars, nacida Trioban de Aristigueta, lejana prima suya a quien amo con romántica pasión. Todo esto nos a puesto a analizar de su vida amorosa posterior, nos llevaría a admitir que fue siempre el viudo de Teresa, sin saberlo el mismo.

S imón Bolívar, además de haber sido un hombre intelectual, preocupado por su patria. Bolívar tenia un atractivo que llamaba mucho a las mujeres, que fue su personalidad , psicólogos, por su cuerpo .Quizás fueron todas estas cualidades lo que hizo que estas mujeres amaran a Bolívar. Este historiador fue gran hombre y esposo.
mante .

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